¿Es verdad lo que escribo?
-Todo lo que cuentas en tus cuadernos de bitácora, ¿en verdad te ha sucedido a ti?
La cajera, una chica del norte de Bulgaria más lista que el hambre, cuando llega mi turno de pagar me suelta, con su carita de oficial del ejército ex-rojo, esta preguntita:
-¿Tiene usted nuestra tarjeta de fidelidad? Por cierto, no he podido evitar quedar intrigada por lo que le ha planteado la clienta que se acaba de marchar… ¿es usted, acaso, de esos escritores que narran todo en primera persona del singular?
Camino de casa, cargado de latitas de atún bajo en sal, yogures de soja y sobres de tofu, cavilaba un servidor sobre la conveniencia de explicar a mis improbables lectoras ambas cuestiones.
Subí a mi piso, encendí el ordenador y… allá van mis respuestas:
No, no tengo la tarjeta de cliente fiel. No soy portador del gen de la fidelidad.
Sí, aunque mis historias no siempre son trasunto de recuerdos personales, en su mayoría y en una buena parte sí que lo son. Si mal no me acuerdo.
Los seres que en ellas aparecen existen o existieron, pero a trechos. Y todos ellos entre sí se prestan rasgos de sus filiaciones y subjetividades.
Las criaturas que no son entes de razón responden en mis cuentos a otros nombres que difieren de los reales. Vamos, que les cambio su gracia:
-Señora: “¿cuál es su gracia de usted?” Así se preguntaba antes a las damas.
Ella contestaba tal que así:
“Exuperancia, para servir a Dios y a usted”
¡Qué cosas! Se hablaba sentenciosamente. En aquel entonces.
En mis historietas, la ficha antropométrica del narrador no se corresponde con la del autor, pero puede personificarle. Aquél, cuando le viene al caso, atribuye a un varón peripecias acaecidas a una hembra, y a la inversa: ¡madame Bovary soy yo, gritaba Flaubert!
Pues señor, érase que se era, sin faltar un sí ni un no, y yo fui y vine y no me dieron nada. ¡En la flor de la vida y sin poderlo ganar!
Va de cuento…
¿Qué más da que sean reales o no tus historias? Lo importante es que alguien se encuentre reflejado en ellas y eso lo consigues.
ResponderEliminarAbrazos
Va de cuentos...y los cuentos se cuentan, y se cuentan bien cuando se saben contar...
ResponderEliminar¿No es así, amigo mío?...y sobre todo cuando estás tan bien acompañado con la realidad como lo reflejan estos versos:
"¿Cómo muerte tenerte
miedo? ¿No estás aquí conmigo trabajando?
¿No te toco en mis ojos; no me dices
que no sabes de nada, que eres hueca,
inconsciente y pacífica?¿No gozas,
conmigo, todo: gloria, soledad,
amor, hasta tus tuétanos?
¿No me estás aguantando,
muerte, de pie, la vida?"
Juan Ramón Jiménez
Besos, Manuel.
A mi me gusta esa ambiguedad sobre verdad o ficciòn. Creo que es algo lùdico, y lo acepto.
ResponderEliminarAsì que, señor Rojas, dème usted ambiguedad, o cualquier otra cosa.
Un abrazo.
Ay Manuel, pues yo voy a ser otra cotilla de esas del super para no desentonar... ¿Esa foto que nos muestras de cuándo es?. No te me enfades, es curiosidad. De todas formas, a mi me gusta lo que escribes, sea cuento o no. Besos amigo.
ResponderEliminarSiempre imagino que lo que cuentas es tu propia versión de un pasado vivido por ti o por otros, aderezada con un poco o con un mucho de creatividad e imaginación...
ResponderEliminarLo que me chiflan son las fotos: ¡ Dicen tanto...!
Un beso creativo ( o dos).
No me importa si tus historias son o no reales tengo claro que me gustan como tengo claro que tu no eres de este mundo perteneces al de mis sueños
ResponderEliminarUn beso tierno de buenas noches
creo que todos los que escribimos ,en mayor o menor medida ,son vivencias,con una pizca de imaginacion,pero lo que en realidad cuenta es lo que se trasmite,y lo mas dificil ,es que llegue al lector,cosa que tu logras siempre
ResponderEliminarun abrazo desde la patagonia
Me puede importar un bledo si tus historias son rales o no, igual que lo que escribo yo, lo que me cae requetemal, es que sacas los peores instintos de mi, envidio tu forma de escribir, mujer envidiosa llena de amor por ti, saludos... en los sueños del olvido, para ti...soy más generosa que tu... mil besos
ResponderEliminarNunca habría dudado de tu sinceridad (a quién le importa perderse en irrelevantes detalles). Supongo que, entre animales de una misma especie, nos reconocemos en cuanto nos olisqueamos la primera vez. Besos.
ResponderEliminarSiento ( o pienso...?) que hay trazos de ficción y otros de realidad.
ResponderEliminarEn la subjetividad del lector está la capacidad de atrapar tus pinceladas de sensibilidad.
Los elementos de ficción son ineludibles.Y tu capacidad de transmitir emociones , también.
Por éso, a través de tus relatos,evocamos y "recreamos" episodios de nuestra propia andadura.
Abrazos.
Da lo mismo que lo mismo da, está muy bien, muy bien elaborado. ¡Como se notan esos sobresalientes y matrículas del Pilar! Bs.
ResponderEliminarTodo debe mezclarse creo yo.
ResponderEliminarA mi me gusta el resultado final
Un beso y buenos días
Escribir escribes maravillosamente ¿qué más da si inventas, narras o es un compendio de ambas cosas?.
ResponderEliminarAhora bien, permíteme que cuestione tus hábitos alimenticios.
Besos
Si, yo como Maria,mi compañera, me pregunto ¿De verdad vas al super y te alimentas de atún?Pero definitivamente, quiero aprender de tus escritos, te admiro mucho.Mil besos
ResponderEliminarManuel, lo de la foto, era porque me parecía mentira que un chico tan jóven escribiera como tú. Creía que era de hace más tiempo. Te felicito y también a tus padres por tener un hijo así. Besos.
ResponderEliminarpues sea verdad, o producto imaginario, es BELLO!...es mi respuesta,poeta!
ResponderEliminargracias!
un abrazo
lidia-la escriba
blog actualizado
Lo que más me gusta de tus historias, relatos y puntos de vista es que tus palabras demuestran mucha experiencia. Con ello no pienso que todas tus palabras estén basadas en hechos reales, pero que sí transmites algo de real en tus post. Las historias que tan bien describiste durante el mes de diciembre sobre tu infancia, -era un gusto leerlas porque mezclabas con mucha sutileza y maestría la ficción con la realidad-, donde creo que tu admirable capacidad de fabular e imaginar ideas muy intuitivas e ingeniosas hacía que olvidaras lo triste de aquella época y resaltaras lo que tu mente de ilusionista y mago consiguió recordar y rehacer...
ResponderEliminartodo esto esto para intentar escribir en un simple comentario, que me gusta que escribas en 1ª persona del singular, en presente continuo o en un pasado cercano y próximo, donde se confunde el ahora con el ayer y donde tus historias son igual de interesantes.
un abrazo d. Manuel M.
jaja
ResponderEliminareres un pisaverde/dandi de la palabra.
:))
Yo creo que sabes conjugar perfectamente fantasía y realidad, que manejas el lenguaje como pocos y que eres un excelente narrador.
ResponderEliminarGracias por compartir tus historias ( sean reales o no, enganchan).
Un abrazo.
Manuel, sabes que yo si te creo, creo en lo dices,en lo escrito es lo que importa, no sé si es verdad o mentira,la mayoría son verdades a medias, o sea quedas igual, jaja, como siempre digo en mi caso un 80 por ciento es verdad, un 20 lo inventas, en el 20 por ciento entran los sueños y lo que quieres para un futuro.
ResponderEliminarEres "viento en las venas de las cosas". Tu forma de decir es admirable.
ResponderEliminarManuel es un hombre de éxito, con carisma, nada más lejos de ser un solitario social y cuando leo sus relatos hago conjeturas, composiciones, imagino e interpreto lo que dice y lo que calla y todo eso lo logra la amistad, la constancia como lectora y el tiempo. Diga lo que diga, quiero creer que ha vivido casi todo lo que narra porque su papel de espectador sin más, no va con él. No es necesario que revele sus sueños verdaderos, basta saber que está anclado con los pies en el suelo y eso le hace contener toda la energía de la tierra.
ResponderEliminarNo iba yo a desconectar sin darte las buenas noches.
Qué dilema,qué problema mi querido Manuel, si la amistad la da el tiempo...y la consancia también, Loli Salvador tiene razón.
ResponderEliminarHola Manuel vine a devolverte el gesto de suscribirte a mi blog y me he suscripto al tuyo que por lo poco que leí me dará buenos ratos de lectura.
ResponderEliminarGracias por visitarme, si vuelves va sabiendo que soy adicto a los comentarios, Aunque vayan de "Acá estoy"
De paso aprovecho para invitarte a:
Imagenes replicadas
http://nidaeldore.blogspot.com
Saludos
Vamos, lo normal del oficio...
ResponderEliminarUn beso
P.D. ¿Sabes que la tarjeta de cliente fiel te da puntos?
Manuelito, si en tus escritos se te nota lo tierno, hombre.. se te nota
ResponderEliminar¡Precioso perro! Me encanta, me recuerda a Chispa.
ResponderEliminarNunca cuestionaria si es verdad o mentira...no creo que tenga importancia....sencillamente ES.
ResponderEliminarY ES maravilloso "leerte"
un abrazo
Entre la verdad y la mentira hay una manzana podrida siempre.El titulo de un poema mío.
ResponderEliminarMe gusta leer lo que escribes amigo mío, entre verdad y mentira hay más verdad que mentira en tus escritos.
Soy adicta a leer tu blog desde siempre... me gusta tu escritura y últimamente entro la última a leer tu blog, pero entro y me nutro de tu saber de poeta y escritor.
Besos de MA y feliz día.
Ya veo que tu compra se parece a la mía. Me ha gustado tu manera de contar las cosas. Besos y gracias por tu visita.
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